sábado, 1 de septiembre de 2012

Somos



Quisiera estar allí, en ese lugarcito tan cerca de mi. Quisiera naufragar en mis pensamientos y distinguir con claridad cuales son mis sentimientos. Quisiera observarme desde arriba con el viento azotando mis cabellos, con un atardecer que adormece mis sentidos, en la conexion perfecta entre la naturaleza y yo, para descubrirme a mi misma, para estar en sintonía con mi corazón, con mi sentir. Acariciarme desde un momento en que dejo de ser yo para ser en escencia completa yo misma. Soy fuego, tierra, aire y agua, soy poderosa mientras siga siendo yo, soy la fuerza de una mujer que lucha, que rie y que llora al mismo tiempo y a la par de su sentir, soy la llama que nunca se apaga y los cielos que nunca dejan de ser cielos, soy la vida que nos envuelve de ternura y protección, soy la sanación que llega en el momento preciso, soy los verdes campos de mi tierra y los senderos que jamás he recorrido. Soy una flor que nace en primavera lista para sorprender, pero humilde al momento de mostrar sus colores, humilde siendo flor. Soy todo lo que quisiera ser, soy el poder que entrega un día hermoso, y la nostalgia de la lluvia que cae justo... cuando tiene que caer. Soy lo preciso, lo sincero, soy simplemente lo que tengo que ser, lo que quiero ser. Soy el vibrar positivo de una mujer que anda descalzas por la tierra, descalzas por el mar y por la verde alfombra que cubre a nuestra tierra. No se trata de ego, no se trata de ser mejor que otro, simplemente se trata de quererse, de valorarse, de darse cuenta de todo lo que podemos llegar a ser simplemente siendo nuestra escencia misma, que es poderosa, llena de fuerza, luchadora, sensible, consciente. Darnos cuenta de nuestra grandeza conservando nuestra humildad que nos permite siempre estar despiertos y saber que hasta nuestro peor enemigo, puede ser tan grande como nosotros, porque es solo un cambio interior, personal, tan mio, tan tuyo... Tan de todos.

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